Cada vez es más habitual que los estudiantes y trabajadores desarrollen etapas de su vida académica y profesional fuera de su país de origen para encontrar mejores oportunidades y explotar al máximo su talento.
Por este motivo, el Bachillerato Internacional está ganando cada vez más popularidad en España, y son muchas las instituciones educativas públicas y privadas que incorporan esta formación en su currículo para proporcionar a los alumnos una educación integral y de calidad reconocida en todo el mundo. Sin embargo, la educación de excelencia no está exenta de retos. Hoy vamos a descubrir en qué consiste el Bachillerato Internacional y sus ventajas, pero también los desafíos que se encuentran los alumnos en una educación internacional.
¿Qué es el Bachillerato Internacional?
El Bachillerato Internacional nació en 1968, impulsado por un grupo de educadores en Suiza. Su objetivo era crear un programa educativo estandarizado y riguroso que preparara a los estudiantes para un mundo cada vez más globalizado y que pudiera ser reconocido mundialmente a la hora de acceder a la Universidad. Actualmente, cuenta con cuatro oficinas regionales (Norteamérica, Sudamérica, Asia/Pacífico y Europa/África/Oriente Medio) que son las que regulan que el programa educativo cumpla con los requisitos exigidos en los más de 120 países en los que se desarrolla.
Desde sus inicios, el BI ha buscado desarrollar la curiosidad intelectual, el pensamiento crítico y una mentalidad internacional. Esto implica que el Bachillerato Internacional se centra, además de en lo académico, en el desarrollo personal y social del estudiante. Por ello, en los colegios e institutos que ofertan el bachillerato internacional en Valencia, Madrid, Barcelona, Málaga, Bilbao y otras muchas ciudades españolas se ofrece a los alumnos el Programa Diploma, uno de los cuatro programas con los que cuenta el Bachillerato Internacional y el más difundido en España.
Formación integral reconocida mundialmente
Este programa se estructura se estructura en torno a seis áreas de conocimiento (Estudios de Lengua y Literatura, Adquisición de Lenguas, Individuos y Sociedades, Ciencias, Matemáticas y Artes), y además completar tres componentes troncales: Teoría del Conocimiento, una investigación independiente sobre un tema de interés para el estudiante (Monografía), y la participación en una variedad de actividades extracurriculares que fomentan el desarrollo personal y comunitario.
Tras completar el Programa Diploma del Bachillerato Internacional, los alumnos tienen la oportunidad de estudiar en cualquier universidad del mundo, siempre y cuando cumplan el resto de requisitos que exija cada universidad en concreto (solvencia económica, cartas de motivación, exámenes como el SAT o el TOEFL, etc.).
Los retos de una educación internacional
El Bachillerato Internacional (IB) es una de las opciones educativas más prestigiosas y reconocidas a nivel mundial, pero los estudiantes que eligen esta ruta se enfrentan a una serie de desafíos que pueden poner a prueba su resistencia y determinación.
Una carga académica muy intensa
Uno de los primeros y más evidentes desafíos de este bachillerato es la carga académica. Los estudiantes deben cursar seis asignaturas, tres a nivel medio y tres a nivel superior; completar el programa de Teoría del Conocimiento, escribir una monografía y participar en actividades de Creatividad, Actividad y Servicio. La cantidad de tiempo y esfuerzo que requiere puede ser abrumadora y, a menudo, los estudiantes tienen que estudiar hasta altas horas de la noche para cumplir con los plazos.
Métodos de enseñanza diferentes que requieren adaptación
Los métodos de enseñanza y evaluación en el Bachillerato Internacional son diferentes a los de muchos otros programas educativos. El enfoque en el aprendizaje crítico y la evaluación basada en criterios puede ser un gran cambio para los estudiantes. Adaptarse a estos métodos requiere tiempo y esfuerzo. Por otra parte, la Monografía que hay que realizar para poder obtener el Diploma requiere una investigación independiente y en profundidad que puede suponer un reto considerable para aquellos alumnos que no están acostumbrados a trabajar de manera autónoma.
Equilibrio entre los estudios y la vida personal
El equilibrio entre los estudios y la vida personal es otro obstáculo importante. Con tantas responsabilidades académicas, los estudiantes a menudo no tienen tiempo para sus hobbies, amigos y familia. Este desequilibrio puede llevar a un alto nivel de estrés y ansiedad. Es esencial que los estudiantes aprendan a gestionar su tiempo eficazmente y encuentren momentos para relajarse y recargar energías. De lo contrario, pueden quemarse rápidamente, lo que afecta tanto su rendimiento académico como su bienestar personal.
Muchas oportunidades de futuro, pero también más presión
El estrés es un compañero constante para los estudiantes del IB. La cantidad de trabajo, las altas expectativas y la presión para sobresalir y entrar en una universidad prestigiosa pueden llevar a niveles de estrés muy altos. No solo se espera que los estudiantes obtengan buenos resultados en sus exámenes, sino que también se espera que sobresalgan en todas las áreas de su vida académica y personal. Esta presión puede ser agobiante, y es crucial que los estudiantes encuentren maneras de gestionar este estrés de manera efectiva. .