El próximo verano está cargado de convocatorias de oposiciones en el área de la educación. Prácticamente todas las comunidades autónomas están perfilando ya sus procesos para los exámenes de los que formarán parte decenas de miles de opositores.
Si eres una de esas personas que aspiran a conseguir un puesto en el sector público, debes saber que en las últimas convocatorias hay un punto en el baremo donde entra la formación con un doble objetivo: mejorar las capacidades y habilidades como profesional de la educación y aumentar el número de puntos para cubrir el baremo de méritos.
Afrontar un proceso de oposiciones de manera sensata
Las características de un buen opositor pasan por la constancia, la dedicación y la organización. Estos atributos no garantizan aprobar y conseguir plaza, pero sí ayudan en gran medida. De algún modo, son factores limitantes, lo que quiere decir que son indispensables para aprobar, pero no basta con esto, pues en las oposiciones para docente de secundaria el opositor compite frente a decenas de rivales.
Además de la nota final, otro aspecto importante es el baremo de puntos, y es ahí donde centros de formación como Opositer son de gran ayuda pues ofrecen cursos homologados online para Oposiciones a Educación en cualquier nivel: maestros de infantil y primaria, profesores de secundaria y formación profesional. En ese sentido, es importante tener claro que la información de las oposiciones cambian de una comunidad a otra y que hay que estar siempre actualizado en estos temas.
Controlar el estado anímico
Los opositores, en su mayoría, pueden dedicarse plenamente a esta tarea durante meses. Eso les permite estudiar largas jornadas cada día y avanzar en su aprendizaje. Para los estudiantes que combinan esta tarea con otras de índole profesional o doméstico, la carga de estrés puede ser más elevada, pero la contrapartida es que tienen también en la cabeza otras preocupaciones y eso les sirve para desconectar.
No obstante, ya tenga dedicación exclusiva para las oposiciones o deba alternar su estudio con otras tareas, la intensidad durante los meses de estudio puede ser tan elevada que esto acabe traduciéndose en episodios de estrés y ansiedad que dificulten el aprendizaje.
Algunos síntomas evidentes de ansiedad son nerviosismo intenso, palpitaciones, tensión muscular, trastornos digestivos o tensión muscular. Más allá de los trastornos físicos en el plano mental se pueden dar pensamientos de bloqueo, sensación de fracaso, irritabilidad y problemas para dormir.
Ante estas situaciones, es importante no perder la cabeza y no todo el mundo está igualmente preparado para ello. Los psicólogos, terapeutas y coaches indican una serie de consejos que a continuación ofrecemos.
No aislarse por completo del círculo social y familiar
Superar un proceso de oposiciones supone prepararse física y mentalmente para ello, y no todo el mundo está capacitado para lograrlo. Existen una serie de consejos que ayudan a que los meses de estudios y preparación sean más llevaderos.
Uno de ellos es no aislarse por completo del círculo social y familiar. Las relaciones sociales favorecen las emociones positivas y aumentan la autoestima. Estudiar con otros compañeros reporta apoyo y sirve para coevolucionar. Si el opositor se centra en sí mismo y se aísla completamente del mundo que le rodea, esto puede llevar a minar el estado anímico y reducir el rendimiento.
Por otra parte, si las relaciones sociales se limitan o se concentran casi de manera exclusiva con otros opositores, el resultado puede ser también contraproducente, porque no se consigue desconectar de esa realidad. Por este motivo, hay que conservar las amistades y tener tiempo para otras distracciones, pero sin faltar a las obligaciones como opositor.
Una buena planificación
Dedicar muchas horas de estudio no siempre es sinónimo de conseguir buenos resultados. Los opositores deben interiorizar que su rendimiento depende por igual de las horas de estudio como de los descansos y las desconexiones.
Es aquí donde entra en juego la planificación. El estudiante hace bien si calcula cuánto tiempo tiene disponible para estudiar, qué parte del temario va a decidir prepararse, cuánto tiempo puede estudiar cada día y hasta qué fecha va a estar preparando cada fase de las oposiciones. No se trata de estudiar más horas, si no ser más productivos.
Cuando pase la fecha de tiempo planificada para determinados temas, continuar con el calendario planificado, para no caer en la frustración. En todo este proceso, los descansos y las desconexiones son imprescindibles. El deporte, por ejemplo, es un buen método para liberar endorfinas y hacer desaparecer el estrés.
Perder el miedo al fracaso
La mente humana funciona de un modo muy particular. Es normal que lo que se aprende en un día, especialmente si se estudie memoria cual papagayo, acabe olvidándose al día siguiente. Esto provoca gran frustración en los opositores, de ahí que sean recomendables técnicas de estudio que van más allá de leer y releer el temario. Incluyen los test, los esquemas, las presentaciones, los vídeos o los podcasts.
Y si no se consiguen recitar todos los temas al dedillo con estas técnicas, lo que no debe ocurrir es dejarse cautivar por la idea del fracaso. Todos en nuestra vida hemos temido alguna vez al fracaso y esto es algo que hay que normalizar.
No se trata de ser un conformista, sino de asumir que existen posibilidades de no conseguir los objetivos aunque se ponga todo el empeño en ello. Cuando una persona estudia oposiciones puede ocurrir que no alcance sus metas en una primera convocatoria. La solución no pasa por abandonarlo todo, sino seguir en la brecha y repensar el proceso, pensar qué se puede mejorar y perseguir más oportunidades.